El Papa Benedicto XVI, expresa hoy, en vísperas de su jira por Estados Unidos que: “se siente profundamente avergonzado por los escándalos de pederastia, (olvidó la pedofilia) de sus sacerdotes” y “promete” tomar medidas en relación al asunto.
Nosotros lo conminamos públicamente a que en estas medidas incluya a nuestros niños LATINOAMERICANOS, algunos, hombres hoy, que han sido estigmatizados de manera aberrante por nuestra propia justicia, por sus denuncias como víctimas –repito- de acceso carnal violento en sus tempranos años de adolescencia. Casos como el del Señor A. José Tavera, violado por el cura rozo, quien en Estados Unidos, país que visita Benedicto XVI, fue juzgado y condenado por la violación carnal en su propio sobrino y a raíz de lo cual, la Iglesia Católica Apostólica y Romana tuvo que pagar una gran indemnización. Las mismas denuncias, sin embargo, en Colombia no solo fueron rechazadas de manera indigna, y “respondidas” por el mismo estado con (en el caso del Sr. Tavera) una “orden de captura”;sino que el mismo estado se prestó para un “intercambio de sacerdotes”,y así rozo se fue para le Vaticano, mientras a Latinoamérica “trasladaron” los curas pedófilos.
Con esta pronunciación de parte de la cabeza de la Iglesia, esperamos que “el fuero” que los protege, sea debidamente removido para bien de las víctimas actuales y posibles y que la justicia se apersone de sus ciudadanos más vulnerables, los niños.
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1 comentario:
Carta abierta a DEMOCRACYNOW.
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El Papa Benedicto XVI; pide disculpas por los escándalos de pederastia. Obviando no solamente el término PEDOFILIA, que es mucho más grave, sino que hablándole a los Hispanos (Latinoamericanos) en los Estados Unidos, no ofrece disculpas por su silencio criminal respecto a las innumerables denuncias que cursan en contra de la Iglesia Católica Apostólica y Romana en nuestros países de origen. Pide “disculpas” en Estados Unidos, porque es el único país donde legalmente se les castigó y donde tuvieron que pagar grandes indemnizaciones por las graves faltas cometidas por sus sacerdotes. El pueblo Latinoamericano que en estos momentos atraviesa un seria situación inmigratoria se pronuncia y solo se escuchan las voces del “perdón”. Pero mientras tanto los sacerdotes pedófilos, siguen siendo trasladados a nuestros países, contando con el silencio y la complicidad de nuestros gobiernos. Siguen cometiendo sus crímenes cobijados por este mismo silencio que ata las manos de nuestros jueces que, cuando los tienen que juzgar, deben dar el máximo en condenas, pero que ante el inmenso poder y miedo genético que producen 500 años de sometimiento, no siempre son las más justas. Nuestros niños jamás reciben indemnización y muchos son severamente reprimidos y hasta atacados legalmente por sus denuncias. Queremos leer la otra cara de la moneda de ustedes que son un periódico que defiende los DDHH. Queremos leer sobre el respaldo que nuestras criaturas merecen. Queremos que las leyes se modifiquen y que la cadena perpetua caiga también sobre los sacerdotes implicados y comprobados pedófilos. Queremos que las indemnizaciones y la política de rehabilitación hacia nuestros niños, sea un hecho. Queremos confiar en que la cabeza de la Iglesia que vive de tantos fieles; nos de una muestra de respeto, bondad y responsabilidad que merecemos.
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Pederastia y paidofilia [editar]
La pederastia se considera erróneamente sinónimo de paidofilia. A pesar de que etimológicamente significan lo mismo (ya que ambas se basan en paidós: 'niño' o 'adolescente'), la pederastia en la Antigua Grecia no se refería al abuso sexual cometido contra un niño prepúber sino a la relación (de índole sexual) entre un hombre adulto y un muchacho adolescente.
Los dos términos han llegado a diferenciarse:
• por malinterpretación de los textos clásicos griegos, "pederasta" ha venido a designar a los homosexuales hombres (nunca a las lesbianas, ya que, también por malinterpretación, se considera que la pederastia involucra penetración anal);
• en cambio "paidófilo" o "pedófilo" designa claramente al adulto (hombre o mujer, homosexual o heterosexual) atraído de manera primaria hacia un niño o una niña, con o sin relación sexual.
Se trata de una interpretación errónea, porque en la Grecia (especialmente en Atenas), la pederastia se refería solamente a la atracción entre un hombre maduro y uno o varios muchachos varones, y no a la relación sexual entre hombres adultos, o entre un adulto y un niño.
El término "pederastia" designaba en la antigüedad griega a la relación (aceptada por la sociedad) entre un adolescente varón (de familias de buena posición social) y un erastes, un maestro varón maduro. El pederasta también podía ser un amigo del padre del adolescente.
La pedofilia o paidofilia (del griego παιδοφιλια y éste de παις-παιδος páis-paidós, «muchacho» o «niño», y φιλíα filía, «amistad») es la inclinación de las personas a sentir una atracción sexual primaria hacia niños prepúberes.
La Real Academia Española prefiere «paidofilia» (etimológicamente más correcta) sobre «pedofilia», si bien esta segunda forma es más usada. En el lenguaje común pedofilias son considerados los que abusan sexualmente a niños.
No debe confundirse la pedofilia con la pederastia (que erróneamente se utiliza como sinónimo en ocasiones), ya que es sólo en el primer caso en el que se hace referencia a la atracción sexual por parte de adultos hacia los niños prepúberes.
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Pedofilia:
Atracción sexual por niños y niñas que no han alcanzado la pubertad.
Más información Pedofilia | Origen
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